Episodes

  • Ese “verdadero pan” viene de Dios, es personal yprovee vida para todo el mundo.

    Anteriormente Jesús había hablado del agua viva, otro elemento esencial para vivir. En el sentido espiritual, Jesús satisface completamente y para siempre ambas necesidades, la sed y el hambre.

    ¿Por qué saciarte de Cristo? Porque todo aquello en lo que tratas de satisfacer tu hambre que no sea Cristo, no te resucitará en el dia postrero. Te dan una satisfacción temporal que te provoca mas hambre y te podrá dar deleite mientras lo consumes. Pero eso no es eterno, es un ídolo creado por ti para tu satisfacción basado en tu necesidad. Solo Cristo sacia el corazón del hombre.

  • Esta predicación es la introducción a la siguiente serie de predicaciones "El Gran Yo Soy". Es importante conocer la identidad de Dios para saber cuál es nuestro lugar en la relación que establecemos con Él. El concepto que nosotros tenemos de Dios es la base para una fe efectiva.

    La mayor necesidad de la iglesia en la actualidad es conocer el carácter de Dios.

    Dios en su soberanía es quien llama y el hombre responde. Llama para establecer una relación y un propósito. En las siguientes predicaciones hablaremos de los Yo soy de Jesús en el evangelio de Juan, “Yo soy el pan de vida, yo soy la luz del mundo, yo soy la puerta, yo soy el buen pastor, yo soy la resurrección y la vida, yo soy el camino, la verdad y la vida, yo soy la vid verdadera”. Esa identidad de Jesús establece su propósito y la relación que establece con nosotros. El hombre necesita el evangelio para conocer a Dios, y necesita conocer quién es Dios para saber cómo debe relacionarse con él.

  • Missing episodes?

    Click here to refresh the feed.

  • Este domingo estuvo compartiendo con nosotros el hermano Abdiel Sánchez. Nos hablo de la paz de Dios como parte del fruto del Espíritu, compartiéndonos la siguientes ideas centrales.

    Sin la justificación de Cristo el hombre se encuentra en guerra con Dios, por lo que carece de la paz. El hombre puede tener paz en su corazón por lo que Cristo ha hecho.

    Shalom (La Paz de Dios) es un estado general de bienestar, libertad, libre de temor. Un estado pleno de contentamiento con Dios y de reconciliación con Él.

    Dios nos libre de lo que equivocadamente estamos pidiendo, y de los lugares donde estamos buscando un falso refugio de paz.

    ¿Cómo está tu Shalom? No negamos las problemáticas. Sin embargo, Dios gobierna. Y es importante que toda la iglesia viva el Shalom de Dios.

    Dios desea dejarnos su paz, su carácter por medio de su reconciliación.

  • En esta predicación el hermano Ramses Flores no habla de la importancia de una permanencia efectiva en Cristo que tenga como consecuencia el fruto en nuestras vidas.

    Las tres enseñanzas principales de este mensaje nos enseñan la importancia de la comunión con Dios y finaliza con consejos prácticos para fortalecer esa relación y que Dios produzca su fruto en nosotros.

  • Habacuc se desahoga y expresa su inquietud con Dios. Toda la nación debe saber que es lo que Dios quiere hacer. Claramente es un diálogo que está teniendo Dios con Habacuc, pero el hecho de responder en plural no da a entender que Dios le responde a Habacuc para que el mensaje sea llevado a Judá.

    No sabemos que esperaba Habacuc, porque muchas veces cuando exponemos nuestro dolor ante Dios, esperamos que actue de determinada manera. De hecho hay ocasiones en las que decimos que hacer para no sentir ese dolor. La respuesta de Dios nos muestra que Dios ve la situación con más seriedad que Habacuc. Y decide tomar una medida mas drástica posiblemente que la que Habacuc tenía en mente, entregar a Judá en manos de los caldeos.

    En primera instancia las respuestas de Dios no van a ser las mas agradables, pero debemos de confiar y saber que Dios ve mas lo que nosotros interpretamos, sabe mas de lo que nosotros estamos conscientes, y actuará mas allá de nuestras peticiones.

    Nos enfrentamos ante situaciones que podemos describir, pero no podremos descifrar. La respuesta de Dios provoca un diálogo, no quiere decir que Habacuc no se queda conforme, pero podemos ver que Dios obra cuando tomamos una nueva perspectiva ante los cuestionamientos que tenemos. Él pudo ver el panorama, tuvo preguntas, tuvo problemas grandes; no le dio la espalda a Dios, sino que eso lo condujo a buscar a Dios con más fervor.

  • Se cree que el nombre de Habacuc tiene raiz en la palabra hebrea “abrazar”. Lutero hace mención a Habacuc como una referencia alguien que abraza al pueblo para consolarlo, mientras intercede con Dios por situaciones éticas desagradables que se presentaban.

    El libro de Habacuc presenta un diálogo entre el profeta y Dios, por lo que es una conversación que surge su profunda y rica teología. Enfatiza que Jehová tiene un control total sobre los destinos de su pueblo y las naciones.

    Nos presenta la idea de que Dios tiene el fin de llevar a sus siervos a que confíen en su soberanía y poder. Y que la vida de sus siervos se caractericen por la fidelidad a sus mandamientos. Dios sabe que no tendremos conocimiento total de sus propósitos, sin embargo si espera que tengamos confianza en Él.

    Los justos son atacados y maltratados por los impios que controlan el sistema corrupto para beneficiarse de la injusticia. En la ley de Moises Dios advierte que ese pecado traería consecuencias graves. Y el lamento de Habacuc es por la aparente inactividad de Dios. No le ha preguntado a Dios ¿Por qué no hace algo ante ciertas circunstancias? La soberania de Dios no solo la vemos manifestada en lo que hace, tambien se manifiesta en lo que no hace. Dios no responderá todas las preguntas que tenemos, por tanto no debemos descansar en sus respuestas, tambien debemos descansar y manifestar nuestra fe en lo que Dios no hace.

    La fe no es para que Dios haga, la fe es para confiar en el a pesar de que no haga. Habacuc 3:17-18 “Aunque la higuera no florezca, ni en las vides haya frutos, Aunque falte el producto del olivo, y los labrados no den mantenimiento, y las ovejas sean quitadas de la majada, y no haya vacas en los corrales; 18Con todo, yo me alegraré en Jehová, y me gozaré en el Dios de mi salvación”.

  • Nahúm es una representación de como el mal que atenta contra la voluntad de Dios es destruido. Esa destrucción de Dios es una venganza sobre aquello que ha amedrentado a su pueblo y ha tratado de impedir el cumplimiento de su voluntad, tomando en cuenta que la misericordia de Dios ha sido manifestada y a su vez rechazada. El gozo del pueblo no se manifiesta por la destrucción o conquista de Nínive, sino porque eso es una afirmación de la fe del pueblo, Judá puede confiar en que Dios intercede por ella.

    La destrucción de Asiria fue el efecto de la falta de seguimiento en su arrepentimiento, la generación que temió a Jehová en dias de Jonás ya no estaba, por lo que en su pecado siguió en su conducta y tradiciones anteriores. Y observamos como en su necedad fueron hostiles contra el pueblo de Dios y como manifestaron una oposición contra Dios, manifestada en las acciones hacia el pueblo de Dios. Se opusieron al pueblo de Dios, a las leyes de Dios, al propósito de Dios.

    Nahúm representa a todos aquellos creyentes con confían en Dios y que a su vez quieren que Dios actúe a favor de un pueblo oprimido. Representa a quienes creen en un Dios celoso y vengador a favor de su pueblo. No se trata de justicia social, sino del cumplimiento de su voluntad para que su pueblo y su remanente permanezca para que Dios sea glorificado.

  • Este domingo 2 de Junio, el pastor Alfonso estuvo compartiendo un mensaje en otra congregación. Te compartimos esta predicación donde estuvo hablando de como la palabra de Dios renueva nuestra mente y debe de ser la base de lo que la iglesia cree y hace.

    Las ideas que se dejaron claras fueron:

    1- Dios habla por medio de la escritura.

    2- El Compromiso de Explicar Fielmente y el Compromiso de Disponerse Escuchar.

    3- La Palabra de Dios Siempre Revelará Nuestra Verdadera Condición.

    4- La Lectura y Comprensión de la Palabra nos Dirige a la Obediencia a Dios.

  • El hermano Ramses nos da una enseñanza muy adecuada sobre la vida cristiana y cuales son los deberes del creyente independientemente de las circunstancias a nuestro alrededor. Tenemos un compromiso primeramente con nuestro Dios y debemos ser ciudadanos ejemplares.

  • Debemos comprender que no hay paz fuera de Dios ni de sus mandamientos. Dios no está jugando cuando se trata de manifestar sus atributos, en este caso, la justicia. Todos aquellos que están en contra de la voluntad de Dios y en contra de su pueblo, por mas que planifiquen cualquier estrategia, siempre, la intervención de Dios será definitiva.

    El pueblo de Dios debe descansar en la soberanía de su Rey. El descanso del pueblo de Dios no se encuentra en los acontecimientos sociales, no hay reposo ni tranquilidad en una sociedad que no confía en Dios; el descanso y la confianza del pueblo de Dios esta en la sabiduría, poder de Dios que se ven manifestadas en su soberanía.

    Nahúm conoció los efectos de las reformas de Josías, una de las cuales consistió en sacar del templo todo lo consagrado a baal y asera, quitar los sacerdotes a otros dioses de los lugares altos para la adoración, sacar los ídolos de Jerusalen, y el regreso al templo como símbolo de búsqueda de Dios (2 Reyes 23:4–11). La fe del pueblo no iba a ser reforzada en su totalidad si Asiria era destruida. La fe del pueblo no se vio demostrada en el agradecimiento por la profecía de destrucción de Asiria, la fe del pueblo se vio en la obediencia antes de que Dios destruyera Asiria. La destrucción del imperio sería solo un elemento para ayudar a que el pueblo de Dios reforzara su fe. Dios cuida y protege lo que le pertenece y lo que le pertenece a Dios, honra a Dios.

    ¿Qué hace el pueblo antes de que Dios actúe? Dios siempre está actuando para que nosotros nos quebrantemos delante de él. ¿Qué hace el pueblo mientras Dios actúa? Es fiel a Dios ¿Qué hará el pueblo después de que Dios actué? Dios siempre actúa en favor de su pueblo y en el cuidado de su gloria y su santidad.

  • El celo, la ira, la venganza de Dios tienen la finalidad de conservar a su pueblo para el mismo. Dios se venga de sus opositores, y derrama su ira en contra de sus enemigos. Es la razón del castigo en contra de Asiria. En este caso, la venganza de Dios es en contra de sus enemigos.

    Dios al ser celoso, demanda lealtad; en su indignación e ira, demanda rectitud, santidad y corrección; y al ser vengativo, provee límites y protección. La venganza de Dios es una expresión de su paciencia y su justicia. La venganza de Dios está bajo su amor y su misericordia.

    Nahúm nos muestra que en el juicio de Dios encontramos la justicia, la venganza, el poder, la misericordia y constante protección hacia su pueblo. El juicio de Dios es tan activo como lo es su amor y su gracia. Por eso la venganza de Dios es la respuesta de los que han sufrido, y de quienes confían en Dios, contra los que han causado ese sufrimiento.

    La Iglesia de Cristo Nunca está desamparada.

  • Nahúm vivió durante el siglo VII AC, una época definida por la violencia. Profetizó entre 663 y 612 como referencia la caida de Nínive en el 612.

    El reinado de Josías, en Judá, significó una nueva manera de afrontar la dominación de los asirios, pues se creía que solo la intervención de Dios haría justicia y provocaría la caída del imperio. Josías no se enfoco en una política antiasiria como el objetivo de su reinado. Josías aparto a pueblo de la idolatría y lo llevó al sometimiento a Dios.

    Jeremías, Habacuc y Sofonías fueron contemporáneos de Nahúm. Estas profesías trajeron ese gozo al pueblo. ¿De que sirve que Dios obre en la sociedad si no obra en su pueblo?

    Dios, en su soberanía y como acto de misericordia, llama a Nahúm para consolar y manifestar su misericordia. Así como Nahúm somos objeto de la misericordia de Dios, no solo al ser salvos, sino al ser llamados para proclamar la salvación en Dios.

    Claramente la destrucción de Nínive es un acto de providencia de Dios, pero se ve reflejado en un actuar completo. Una victoria que no solo se ve reflejada en la destrucción, se ve reflejada en el sometimiento de su Pueblo.

  • La oración también es una expresión de afecto entrañable. Nadie puede hacer su mejor trabajo como cristiano sin la ayuda en oración de sus colaboradores.
    Muchos han dicho, yo espero una iglesia donde se sostengan en oración y se manifieste el afecto fraternal, pues empiece sosteniendo en oración y manifestando el afecto fraternal.
    La gracia del Señor nos salva, nos transforma y nos guarda. Nuestra vida espiritual, la comunión, el servicio y todo aquello que disfrutamos como iglesia es el resultado de esa gracia; la gracia nos mantiene en victoria sobre el pecado y nos protege del mundo. La gracia de Dios nos guía en nuestro andar diario y nos protege de todo aquello que busque interrumpir nuestra comunión con Dios. La gracia de Dios se refleja en el trato con otras personas y por la gracia damos testimonio a quienes no le conocen a Cristo como Salvador.

  • Dios no solo da paz, también santifica. El creyente es santo porque es puesto aparte, ha sido consagrado, dedicado separado para el servicio a Dios mientras se encuentra en el proceso divino de pulirlo, de hacerlo puro cada vez más conforme a él.

    Es necesario no apagar el espíritu para que por medio de él se haga el proceso completo. Dios nos da paz, nos santifica y perfecciona para su servicio. El hombre no puede hacer santos a otros; la santidad es un proceso divino en el cual está presente todo lo mencionado en los consejos anteriores. Jesús pidió al Padre que fuéramos santificados en su verdad y su palabra es verdad.

    Habla de una bendición integral. Una petición de integridad para el creyente. Está orando para que Dios use todo lo que el ser humano es para cumplir la voluntad de Dios. Y que todo lo que el ser humano es, sea guardado. La vida santa y la paz se mantiene irreprensible, pura y sin culpa delante de Dios.

    Pablo enfatiza que todo creyente es llamado por Dios para ser salvos, ser restaurado y servir. Y Dios en ese llamado para salvación y servicio restaura, limpia, anima y pone al creyente en un nuevo camino.

  • Eso es rebelarse contra el Espíritu, es no aceptar su dirección, y reprimir o ahogar sus impulsos. Muchos creyentes no conocen sus dones espirituales porque han apagado el espíritu. En consejo de Pablo en Efesios 4:30 es “No contristéis al Espíritu con el cual fuiste sellados”, y el contexto donde da esa explicación es la nueva vida en Cristo, por lo que un creyente puede tener el espíritu inoperante en su vida cuando no cultiva su relación con el Espíritu Santo.

    Dejar que Dios obre no es sinónimo de no hacer, es ser responsable en nuestros deberes para que Él sea quien haga todo. Debemos permanecer en la oración, dependencia, esperanza y santidad.

    Se cree que la aparición de tantos falsos profetas, extremistas en cuanto a la espiritualidad, llevaron a algunos tesalonicenses a darle poca importancia al Espíritu Santo sin caer en el extremismo y en la mal interpretación del obrar del Espíritu. ¿Cómo obra el espíritu? Por medio de su palabra. La profecía es la verdad de Dios manifestada al hombre. ¿Dónde encontramos la verdad de Dios? En su palabra.

    Toda enseñanza o palabra hay que ponerla a prueba para ver si es o no la verdad de Dios. Si escuchamos algo que contradice la Biblia, hay que rechazarlo. Pero debemos de conocer la palabra. El discernimiento espiritual viene por medio del conocimiento de la palabra de Dios. El espíritu opera por medio de la palabra.

    Mi felicidad no es la justificación a mis acciones, la santidad debería de ser mi filtro para obrar. No te preguntes si te hace feliz o si te da placer, pregúntate si te santifica.

  • Si la vida cristiana es una vida de gozo en el Señor y el gozo es un fruto del ES, el mandamiento indirecto es a permanecer en el Señor. Si no estamos en gozo, estamos en desobediencia, no porque no lo produzcamos, sino porque no estamos permaneciendo en la fuente que lo produce. En circunstancias tristes y desesperantes, en un mundo desordenado y lleno de maldad, son los cristianos quienes pueden expresar alivio provocado por la permanencia en Cristo.

    No solo el gozo es permanente y a pesar de las circunstancias, la oración también. La oración y el gozo no son aparte, de hecho “orar sin cesar” tendría el efecto de mantenernos en gozo.

    La vida de oración es una vida de disciplina. La oración no siempre es una expresión verbal. Hay ocasiones en las que una oración a Dios se manifiesta con lágrimas, con una actitud de humillación a Dios sabiendo que necesitamos de él. El mandato nos indica que la oración no es solo individual sino colectiva, se ora en la congregación, y la toda la iglesia debe tener la disciplina de la oración individual.

    Cuando se ora por todo, a pesar de todo y en todo momento, Dios produce un gozo, un consuelo que sobre pasa las circunstancias. Es donde el creyente puede agradecer por ese gozo, esa paz a pesar de las circunstancias. La gratitud tiene sentido cuando es basada en lo que Dios produce, no en lo que yo quisiera que Dios hiciera.

  • Pablo nos hará percatarnos de que todos en algún momento necesitamos apoyo, guía, exhortación, ánimo de parte de la misma iglesia. Aunque no parezca a simple vista, estos versículos son una radiografía de la madurez cristiana.

    La responsabilidad de ver por el bienestar de la iglesia es responsabilidad de la iglesia en general. Es deber de cada creyente dentro de la congregación hacer su parte para el bienestar del cuerpo de Cristo. Este pasaje no se debería de aplicar solo si en una congregación no hubiera gente débil, desanimada, si en una iglesia hubiera gente que no desespere a otra, o iglesias en las que no hubiera gente ociosa.

    No puedo ser empático ni comprensivo con el insubordinado, rebelde y ocioso porque estaría menospreciando la dedicación de los trabajan hasta el cansancio, presiden y exhortan con amor. Aunque el desánimo es común, no es un estilo de vida. Es decir, cuando el desánimo es una característica común del creyente, debemos invitarlo a que examine su corazón. Los débiles necesitan saber y sentir que no están solos, que hay hermanos en la congregación que desean sostenerles y ayudarles a alcanzar una vida fuerte.

    La iglesia debería de ser un sustento, un refugio para el débil, para el de poco ánimo, incluso para el ocioso, porque es el único lugar donde puede ser restaurado. La responsabilidad de la iglesia es ser paciente y bondadosa con ella misma. La bondad y la paciencia no se logran con indiferencia. La iglesia debe recibir el bien de la misma iglesia, la sociedad debería recibir el bien de la iglesia. Los hijos de Dios son los únicos facultados para pagar el mal con el bien.

  • Después del mandato de animarnos de animarnos y edificarnos unos a otros, Pablo va a terminar su primera carta a los tesalonicenses explicando una parte del “como”. Este primer consejo está dirigido a la iglesia en general.

    La funcionalidad de la iglesia depende también de la aceptación y el reconocimiento de nuestros roles. Habría menos problemas o las circunstancias tendrían una mejor solución si aceptáramos la soberanía de Dios por medio del sometimiento a la hermandad en la iglesia. Ese reconocimiento tendrá como consecuencia un respeto mutuo. Muchas veces la falla en la resolución de problemas es falta de aceptación de la autoridad, y un mal ejercicio de la autoridad.

    Hay que reconocer el valor y apreciar el servicio de los líderes. No debería de haber lugar en la iglesia para líderes que no tengan intenciones de servir.

    A los que dirigen bien y edifican el cuerpo de Cristo por medio de un liderazgo que se manifiesta por un trabajo arduo con base en el Señor, hay que “tenerlos en alta estima con amor a causa de su obra”. No solamente por amor al hermano, sino porque las repercusiones de ese trabajo se verán reflejadas en su obra. Quiere decir que los frutos de la obra de una persona, en su momento se harán evidentes.

  • La iglesia tiene la confianza de que Cristo viene por ella, y Cristo ha depositado su confianza en la iglesia para seguir desarrollando su labor de hacer discípulos hasta el fin del mundo.

    La salvación en Cristo es individual, pero se vive en comunidad. Nos provee una nueva relación con Dios y a su vez una relación con su cuerpo. Los miembros de la iglesia buscan edificarse y animarse entre sí. Buscamos animar y buscamos ser animados por la iglesia. La comunión de la iglesia debería ser una prioridad en la vida de cada miembro por medio de la comunión con Dios de cada miembro lo que provoca que cada uno cumpla con su parte.

  • Pablo alienta a los creyentes a que hay vida eterna para los creyentes que mueren, Cristo venció la muerte con la resurrección. Para el cristiano la muerte física es el comienzo de un futuro despertar. Creyentes y no creyentes nos enfrentaremos a la muerte. Nos enfrentaremos a la muerte de las personas que amamos y a la muerte propia. La muerte es un acontecimiento que no podemos evitar y una verdad bíblica que no debemos ignorar.

    Es de suma importancia resaltar que en esta porción el propósito de Pablo no es enfatizar o sustentar la doctrina del “rapto”, sino la acción de Dios en reunir a la iglesia universal. El objetivo no es el sensacionalismo de rapto sino el poder irresistible de su llamado para convocar a todos los creyentes, ya sea dormidos o vivos.

    Alentémonos a no desmayar y a buscar cualquier oportunidad para fortalecernos en la fe. Alienta que ni la misma muerte tiene la capacidad de alterar nuestra fe y nuestra esperanza en Dios. Y aunque experimentemos tristeza en la separación de un creyente a causa de la muerte física siempre tendremos la esperanza en el poder de la resurrección y el poder eterno de nuestro Dios.