Episodios
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El capítulo 9 del Atascadero incluye un relato de Elena Claver llamado "Adicto", notarás un nudo en la garganta.
He extraído otro fragmento de
"Jaulas de Metacrilato" de Kiril Brisliev ante las peticiones desesperadas de algunos de los dementes del psiquiátrico.
Y por último os aproximaré a "Batallitas", un proyecto personal que algún dia verá la luz en papel, contando con la ayuda de un buen grupo de trastornadas y trastornados, que narrarán en primera persona como fue regar de sangre fascista las calles de Madrid en unas décadas peligrosas.
De fondo vas a escuchar a
Bridge City Sinners
Dragunov
Strong Conviction
Testosterone
Heroes 2 None
Ansia Viva
Cro-Mags y
Demented Scumcats -
Un mazo de hierro te rompe el cráneo
Rodillas hincadas y palmas juntas
En estos ojos no verás piedad
Ni en las letras que configuran las palabras de un conjuro más amargo que la hiel.
Acercaos, voy a leeros una carta que sació mi curiosidad y asesinó la mínima ilusión que albergaba un verdugo convertido en dolor viviente.
Aparte de los habituales, suenan Tokio Rankers, y mi gata Antonia, porque ella quería y yo también.
POR FAVOR, APOYADME, O DADLE AL CORAZÓN, QUE SE VA A PARAR DE NO LATIR. TAMBIÉN PODEIS COMENTAR. -
¿Faltan episodios?
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Júbilo y honra para ésta institución mental, pues hoy nos visita Valeria Surcis, del podcast QUIERO CONTAR TU HISTORIA, a leer alguna reflexión sobre el caso de Mary Bell, disfruten de su hipnótica voz y de la adorable intervención de su pequeña en la mini-dramatización. Sean gentiles y muestren agradecimiento y respeto. Sigan su podcast y, si no es mucho pedir, toquen mi corazón o suelten algunas monedas.
Además tendrán una nota leída del asesino Carl Panzram y un cuento tragicómico sobre secretos, agravios, crímenes y venganzas.
Con dos canciones, además de las habituales, a cargo de The Specials y Madness -
Tenemos el honor de volver a contar con Inge Stinson leyendo una nota de despedida fúnebre de una paciente a la cual le hicieron un SPOILER de su vida
Es muy útil para mantener la motivación, que dejes algún comentario, muestra de gratitud pulsando el corazón, o aportándome una ayuda de 1,49 al mes para comprar clavos para mi ataúd.
ANTHRAX-DEMENTED ARE GO-IDLES -
El frío que padecemos en este agujero no es la única amenaza para tu garganta. A la vuelta de la esquina puede estar acechando el destino, en forma de garras humanas, dispuestas a destrozar tu tráquea para aplacar la furia de una diosa ancestral y cruel. ¿Quieres que te cuente más?
Sentémonos allí, dando la espalda a la pared y te hablaré de la plaga de cuellos rotos y cadáveres apilados que una día asoló el ATASCADERO.
Además te leeré un relatillo de "VK, Sueños y Pesadillas"...
Le robé el móvil al hermano de uno de los enfermos y llevo unos pocos días oyendo a X-Ray Spex, Impaled Nazarene, Me and that Man, Warwound, Cicatriz y Demented Scumcats
El Atascadero. Episodio 8. -
Cuatro decenios de hambre y palos Fusilamientos y niños robados Cuatro puntos cardinales tiene tu patria Miseria, miedo, muerte y tristeza amarga. Escucha la confesión de un hombre al que le fue imposible vivir con la culpa y decidió erradicar la mala semilla. Por eso está aquí encerrado. Aqui, en el Atascadero, además de emociones fuertes tienes comida, muda, psicofármacos y duchas frias. No te quejes. Anthrax-King Diamond-New Model Army- Idles.
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Cuatro esquinitas tiene mi cama
Cuatro angelitos que me la guardan
Son cuatro espectros con alas negras que enseñan los dientes mientras me observan
El sueño químico me invadirá atado y sedado en esta cama, hasta que llegue la angustia que me trae cada noche el fantasma de las tres de la madrugada.
Cuatro asesinos entran en casa
Cuatro dementes en mi pasillo
Vienen con ansia de venganza
Una barra de hierro y tres cuchillos. -
Una horda de fanáticos asaltan los cielos, convencidos de encontrar vampiros y consumidores de adrenocromo.
Quizás los reyes Magos no les trajeron los regalos que esperaban. Quizás la decepción les impulsó a una locura colectiva.
En el Atascadero no hay espacio para la decepción. Sin esperanza no hay miedo. Y sin miedo se pueden romper todos los límites, los humanos y los divinos.
La Decepción.
Desengaño, desilusión, amargura.
Una lluvia helada en la espalda desnuda, el tobillo atrapado en el cepo, rasgando, mordiendo la carne. -
He tardado en coincidir contigo. No he estado en confinamiento solitario como Charlie Bronson, aunque no es sobre mi sobre quien quieres escuchar hablar. Es mejor que te cuente cosas de Charlie, de Ulrike y de tantas mujeres y hombres que en estos días tan entrañables se encuentran entre cuatro paredes.
También te leeré una carta que es el silencioso aullido de pena de quien ve como le roban la vida a su hermana en nombre de la moral y la decencia. -
En el Atascadero han estado encerrados, que recuerde así se primeras, tres demonios con muchas coincidencias entre sí.
Déjame que te hable de sus luces y sus sombras.... -
Capitulo 4 donde te hablaré de un episodio particularmente violento y oscuro de este agujero perdido en el que te encuentres ahora: el día en que la guerra estalló en El Atascadero.
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Adoremos al Señor en cada una de sus manifestaciones.
En cada sacrificio que nos exige. Cuando los celadores nos ponen la camisa de fuerza, cuando nos llevan arrastras a las celdas acolchadas. Adoremos nuestra naturaleza semidivina a su imagen y semejanza los deformes, las rechazadas, los electrocutados, los engrilletados y quienes deambulen por estos pasillos con ojos alucinados por las drogas. Porque Dios se presenta de manera extraña y sus caminos son inexcrutables. -
Yo no vi lo que pasó aquella noche, pero si que sé que aquel criminal pederasta era perfectamente capaz de matar a su hija para conseguir dinero...""Anfetaminas y vodka, soledad y dolor. En el último tren del día, pisando un periódico mojado de lluvia, intentando reconocer al político que me sonreía en la foto de la primera hoja, con la cabeza como un Sputnik y el cuerpo en ruinas, como casi todos los domingos."
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Si has llegado al Atascadero seguramente no sepas muy bien si es de día o de noche, y la verdad, da un poco igual. La mayoría de la gente que llega aquí viene atada a una camilla y bajo los efectos de la sedación.
Después de los primeros momentos de confusión, tras el convencimiento de que es inútil repetir y repetir que esto es un error, cuando te das cuenta de que ni llorando, ni amenazando, ni suplicando vas a salir de aquí... te resignas y decides prestar atención a la colección de seres estrambóticos que deambulan por los pasillos y las habitaciones de este lugar tan pintoresco y tenebroso.
