Episodit
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Gonzo sale a la calle durante el día para ir a la Cuesta de Moyano y allí se topa con José Ángel Mañas, autor de Historias del Kronen y, como siempre, le pregunta y le pisa las respuestas. Al final, llegan a un acuerdo: que Gonzo es muy Gonzo. Además Porres se topa con Lara, del proyecto popular www.soydelacuesta.org (seguidlas en Twitter: @soydelacuesta) y le suelta su mentira del día: "La mitad de mi colección de libros es de la Cuesta de Moyano". Hay que adorarle.
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Puuttuva jakso?
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En esta nueva entrega de GONZO, Porres se pone sentimental después de haber ingerido un cóctel de drogas legales. Sus reflexiones sobre el amor familiar y la actualidad llevan un filtro que Instagram jamás podrá igualar. Además, en este episodio Gonzo sale a la calle y entrevista al periodista y escritor gallego Javier Becerra, que acaba de publicar 'La música no es lo más importante'. Al parecer Ian Curtis era divertidísimo. Por eso se suicidó. Gracias, Porres.
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Porres va al concierto de Tulsa, que podría ser su amor platónico. Allí conoce a Íñigo Coppel, músico bilbaíno, amante de Dylan y Loudon Wainwright III, que lleva 18 años en Madrid sobreviviendo de la música y le vierte todas sus miserias. Lo mismo que hace con los parroquianos del bar de abajo. Porres promete y promete y promete y luego da mucho menos. Pero lo que da es tan grande que no cabe en este podcast.
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Las últimas 24 horas en la vida de Fernando Porres han sido una montaña rusa. Un sábado que prometía y que se va torciendo y una muerte inesperada de alguien que marcó su vida desde los 18 años. Toda la gama cromática sentimental de Porres en menos de 15 minutos está aquí, condensada y a punto de resquebrajarse. Esto es podcasting vérité. Esto es lo que hay. O lo pillas, o lo grabas.
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A Porres le dan una acreditación para el Festival Eñe y logra hablar durante un minuto con su ídolo Guillermo Arriaga, escritor mexicano de libros y guiones, conocido mundialmente por su aportación a películas como 'Amores perros', '21 gramos' o 'Babel'. Y todo eso sin que nadie de seguridad le abra la cabeza. Un éxito.
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Porres ha tenido una semana difícil y asegura que no habla cuando no tiene nada que decir. Después de su Actimel y su orfidal, Porres se enfrenta al sábado con algunos inconvenientes: se ha comprado un plato para escuchar discos de vinilo que no le funciona.
