Episódios
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Llevábamos un tiempo sin grabar un nuevo episodio. ¿Por qué? Quizás este no esté editado, pero sale del corazón.
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¿Qué cosas buenas y no tan buenas nos ha traído vivir fuera de nuestro país? Te lo contamos en este episodio.
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Estão a faltar episódios?
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Sí, son tiempos difíciles, pero quizás tengan algo bueno por ahí refundido... o no tan escondido.
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A veces sentimos una fuerte necesidad de cerrar ciclos. Dejar ir no es fácil pero si el alma lo pide, es necesario. Hoy despido a Ana Saludable llena de agradecimiento.
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Cada quien tiene una guía que le ayuda a entender que es lo más importante en su vida y cómo decidir sobre ciertos aspectos prácticos. Para nosotros son las emociones. ¿Quieres saber por qué?
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¡Mover el cuerpo! Para algunos, algo liberador. Para otros, un castigo. ¿Esas concepciones han cambiado con la cuarentena? ¿Qué ha pasado con el movimiento corporal después de pasar tantos días en casa?
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Con el tiempo y las muchas circunstancias que vive y que lo rodean, el cuerpo cambia. ¿Qué pasa las relaciones con nuestra pareja cuando se viven esos cambios? En este episodio, nosotros te contamos sobre la forma en que lo hemos vivido.
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Estados de ánimo, temperamentos, emociones... "soportarnos", conocernos, acompañarnos, apoyarnos...
Para muchos, vivir con otra persona y sus emociones ha sido algo nuevo, para otros, volver a un viejo conocido que se había olvidado. Estar todo el día con alguien, implica también compartir su vulnerabilidad y reconocer la nuestra. ¿Cómo apoyar nuestras emociones?
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La publicidad ha hecho un gran trabajo haciéndonos creer que todo lo que se hace llamar "natural", es completamente beneficioso e inofensivo. Los aceites esenciales son una maravilla, pero si se usan de forma descuidada pueden resultar convirtiéndose en algo peligroso. Hablemos un poco de eso.
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Esta semana tuvimos la noticia de que comenzarán a relajarse las medidas del confinamiento. ¿Qué opinamos al respecto?
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Cumplí años en pleno confinamiento pandémico y queremos contarte cómo fue nuestra experiencia y cómo nos sentimos ese día.
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Hoy con el amorcito hablamos sobre las cosas buenas y no tan buenas que hemos notado y sentido, después de casi tres semanas de estar en casa.
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Después de que han pasado varios días de esta crisis, comenzamos a notar, que en una cuarentena las necesidades emocionales son tan importantes como las físicas.
En este episodio, el amorcito y yo te contamos cómo la estamos pasando y llevando después de 2 semanas con medida de semi-confinamiento.
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Con este episodio me gustaría invitarte a pensar las cosas más allá del miedo y el fatalismo, e incluso, más allá de los aspectos únicamente de salud. Reflexionemos un poco sobre nuestro papel y nuestras responsabilidades como miembros de una sociedad, que gracias a una enfermedad, se está viendo obligada a hacer una pausa.
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Seguramente has escuchado que existen varias formas y/o técnicas para meditar. A lo mejor te preguntas cuáles son, o si hay alguna que resulte mejor que otra. Precisamente sobre eso, y sobre cómo nuestra individualidad influye a la hora de escoger la mejor, hablamos en el episodio de hoy.
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A veces no es tan malo que las cosas no salgan como las planeamos. Aunque son situaciones que retan nuestra necesidad (a veces un poco obsesiva) de tener todo bajo control, al final, pueden terminar enseñándonos sobre la flexibilidad y la necesidad de soltar, fluir, sentir...
Hoy, te comparto algo de mis angustias y te cuento como algo que no salió como esperaba, terminó siendo una muy buena cosa. -
¿Te ha pasado que quieres incorporar, mejorar o retomar un hábito y pareciera ser una tarea imposible? ?Estás lleno de frustración y sientes que estás haciendo algo mal?
¿Se te ha ocurrido preguntarte que no tiene nada de malo no poder y que, a lo mejor, ese hábito no es lo que estás necesitando en este momento de vida?
En este episodio hablamos un poco sobre la necesidad de darnos el permiso de ser imperfectos con nuestros hábitos y nuestras acciones de autocuidado.
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Las redes sociales tienen tanto poder cómo nosotros les asignemos y les permitamos que tengan. Pueden meterse en nuestras cabezas y en nuestras vidas, según los límites que les establezcamos. Aprender a mirar las publicaciones de las redes sociales con ojos críticos, y de acuerdo a nuestras propias circunstancias, también es preocuparnos por nuestro bienestar.
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¿Hace cuánto no te das tiempo para pensar? Vivimos en un momento de la historia en que mantenemos nuestra cabeza estimulada de alguna manera. Eso ha ayudado a que siempre esperemos una respuesta inmediata, de alguna fuente externa, a cualquier pregunta que tengamos. Por consiguiente, nos desconectemos de nuestra propia capacidad de resolver problemas.
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