Reproduzido
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El milagro es que vos vivís.1) La obra de Dios: Si te pones a ver todo lo que hay a tu alrededor, es un milagro. Pienso en Tony Meléndez, también en Nik y en otros que dan testimonio de sus vidas. Me quedo con lo que dice Tony en ese video donde muestra cómo creció sin tener brazos. Cuando se presentó ante el Papa Juan Pablo II y le tocó la guitarra, con la particularidad de tocar con los pies. Cuando hizo con esas ganas y con esa visión sobrenatural canciones para Dios y para la vida. Y termina su testimonio diciendo «Cuando veo a alguien que tiene brazos, me digo: eso para mí ya es un milagro».2) El milagro en ti: Jesús hizo y hace muchas cosas en vos y con vos, solo que tenés que darte cuenta y mirarlo. No temas seguir descubriendo la mano de Dios en vos y las cosas que hace en otros sin darte cuenta, a través tuyo. Vos sos una ficha muy importante en la vida de otros, entendelo.3) El seguimiento: El verdadero seguimiento a Jesús no es por un dame-yo te doy. No, tiene que ser desinteresado. El seguimiento a Jesús es para descubrir su persona, su amor. Lo que nos hace enamorarnos más de la vida y nos lleva a ver la vida como un milagro. Hasta el cielo no paramos.--- Support this podcast: https://podcasters.spotify.com/pod/show/misioneros-digitales-catlicos/support
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Tu paz.
1) Escandalizar: Estamos en un mundo que busca y que hasta crea los escándalos. Hoy todo el mundo se escandaliza por todo… Hoy pidamos a Dios, vos y yo, ser siempre prudentes. El tema es cuando vos sos el que genera escándalo, cuando sos vos el mete púa, cuando sos vos al que le encanta meter cizaña en una conversación y buscas generar conflicto. Qué feo es que nos tengamos que cuidar de vos, porque lo que digamos lo usas para generar pelea. Hoy pregúntate si sos una persona que genera conflicto. Eso hace mucho mal a la Iglesia, a la familia y a la vida. No podés ser una cizaña andante.
2) El perdón: Siempre estaremos luchando para aprender a perdonar, porque perdonar es difícil y cuesta. Porque es perdonar a alguien que nos hizo doler. Hoy miremos la cruz y pidámosle a Dios que nos ayude, porque lo que te pide y me pide es muy duro. Vos y yo sabemos que no es fácil perdonar de corazón; que Él nos ayude.
3) La fe: Solo la fe nos ayuda a no escandalizar y a saber perdonar. Solo la fe nos hace personas que encuentran en esta vida ese gustito de encontrarle algo más. La fe es ese don que nos llena y nos sacia. Pidamos fe para saber perdonar y para saber convivir, vivir y sobrevivir.
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Círculo vicioso.
1) Lo que contaban: La conciencia de Herodes no estaba tranquila y por eso caía en pensamientos vacíos o fantasías, sabía que la conciencia le decía que se había mandado una macana grosa. Es por eso que en vos y en mí nos pasa lo mismo; hay temas que nos dan vuelta por la cabeza porque la conciencia no nos deja tranquila y son temas que no supimos resolverlo y asumir que hemos cometido un error. En este sentido, cuánto bien nos hace la confesión, ya que nos ayuda a matar esos fantasmas que nos dan vuelta hace años y no nos atrevemos decirlos o simplemente ya no nos animamos porque pasó mucho tiempo. Pero hay cosas que quedaron grabadas en tu mente y necesitan salir, vos la tenés que dejar salir ¿a cuántos mataste con tus comentarios o con tus actitudes? Y aún hoy esas personas o esas situaciones te vienen a tu mente. Reconoce tus errores y tus mañas, malas actitudes y háblalas para que se vayan y no sigan habitando en vos.
2) Perdió la cabeza: Sí sí, perdió la cabeza, pero no Juan, sino Herodes. Él perdió primero la cabeza por una fantasía, por una coquetería; cuántas veces perdemos la cabeza por pasiones… qué duro se hace cuando te dejas llevar por el sentimentalismo y por la pasión. Al final por querer quedar como un capo y un galán, Herodes queda en la historia cómo un asesino y despiadado; vos por creerte el capo de los capos y el más groso de todo por presumir, podes terminar siendo una asesina o un asesino, matando las ilusiones y la vida de otro. Tené cuidado que a todos nos pica el bichito del galán o el de que maneja todo. La humildad es buena consejera y la disciplina, el controlarte, es un buen tranquilizante. No te imaginas lo lindo que es dormir a la noche tranquilo, pero por una pasión desencajada podés padecer tu vida, porque te hace perder la cabeza.
3) No quedar mal: Este miedo de Herodes podés pasarla vos y yo. El vivir según los otros. ¡No! Vos tenés una identidad y un estilo de vida, no podés ser una persona que busque quedar bien siempre con los otros porque eso también te lleva a ser un títere y terminas haciendo cosas que no querés, incluso destruyendo la vida de otros. Cuántas veces por mostrarte con poder terminas siendo esclavo de la mirada de otros. No pierdas la cabeza por un «me gusta» en Facebook, mucho menos pierdas la cabeza por un comentario o un corazoncito en Instagram y menos pierdas la cabeza por ser títere de los que te rodean. Si tenés en claro quién sos vos, qué es lo que querés y sabiendo aceptar tus limites, tu cabeza siempre estará bien puesta.
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